Shantala es una propuesta de masaje que busca transmitir al bebé sensaciones placenteras en un ambiente cálido.
Se le llama así porque ese era el nombre de una joven madre que masajeaba a su pequeño en las calles de Kerala, una población ubicada al sur de la India. Frederick Leboyer, médico ginecobstetra francés, observó de forma espontánea la secuencia de movimientos que la mujer hacía y los trajo a Occidente en la década de los años 50.
“Shantala más que una técnica o método; es el arte de masajear al bebé” la realización de este tipo de masaje, restaura el desequilibrio del recién nacido, fortaleciendo sus órganos internos para dar al niño resistencia a las enfermedades y estimular su cerebro. De igual forma favorece el desarrollo de vínculos afectivos positivos entre padres/madres y sus bebés, fomentando así la comunicación a través del tacto, repercutiendo en la salud física y emocional del bebé durante toda su vida.
El toque amoroso, con respeto y atención total es lo que el Masaje Shantala enseña, es decir, cómo podemos decirle a nuestro hijo “Te amo” sin usar las palabras. A través del tacto, se puede decir “te amo” de este modo, el bebé entiende que es amado en un nivel muy profundo. Tanto los bebés como los niños, entienden y escuchan lo que los padres hacen, más que lo que dicen. Si de una manera regular le damos un Masaje Shantala a nuestro hijo (tres o cuatro veces a la semana, por las personas más importantes para él como son sus padres o cuidadores), le resultará beneficioso no sólo al bebé/niño sino a quien realiza el masaje.
Normalmente no pensamos en el sentido del tacto, pero es el sentido madre. Es a partir del tacto, que el resto de los sentidos se desarrollan. Nuestra piel es nuestro órgano más sensible y nuestro mejor protector. Nuestra piel y el sentido del tacto es nuestra conexión con el mundo externo. A través de la piel, podemos sentir y entender lo que pasa a nuestro alrededor. El ser tocado y masajeado trae conocimiento a nuestras observaciones inconscientes.
Para los bebés, este sentido del tacto es el lugar central del descubrimiento, que forma la base de su bienestar emocional. Ésta es una de las mejores razones por la cual hay que estimular la piel de su bebé y asegurar un buen desarrollo.
Mientras la madre toca a su bebe/niño no solo se produce estimulación táctil, a la vez está produciendo estimulación multisensorial: el bebe la oye hablar (estimulación auditiva), contactan sus miradas (estimulación visual), percibe el olor de la madre (estimulación olfativa), y a través de su piel siente las manos de su madre (estimulación táctil), Incidiendo en su desarrollo psicomotriz.
Las tradiciones orientales practican el masaje infantil desde hace miles de años. Sus teorías se apoyan en el concepto fundamental del QI o del PRANA, energía vital presente en todo el universo. El QI o PRANA es la fuerza que activa la vida y fluye en todos los seres vivientes.
La circulación y el equilibrio de ese QI o PRANA determina en el cuerpo del niño cada aspecto de su desarrollo, su salud y su potencial. El flujo del QI o PRANA se puede ver afectado por factores físicos (Ejercicio, sueño alimentación),factores emocionales y el entorno en el cual se desarrolla el ser.
El masaje restaura y promueve el libre flujo del QI a través de todo el cuerpo. Según el enfoque oriental si el QI o PRANA fluye libremente el niño será más sano, vivas y feliz.
